BIG es conocido a nivel mundial por sus diseños formalmente poco convencionales, al punto que muchas veces motiva a preguntar cómo lograron superar este o este otro desafío estructural.
Tal es el caso de Honeycomb, un edificio residencial de lujo actualmente en construcción en Bahamas. El sello del proyecto es su fachada hexagonal integrada por balcones privados, cada uno de los cuales posee su propia piscina al aire libre. Y este es precisamente el mayor desafío ingenieril del proyecto, ya que cada balcón (incluyendo la piscina) pesa entre 48 y 122 toneladas, y proyecta un voladizo de hasta 5,3 metros de largo. ¿Cómo lo hicieron?
Un factor esencial del diseño es el uso de un hormigón especial ("superslab") capaz de proyectar un voladizo de 5,2 metros sin apoyos inferiores. Esto se consiguió reduciendo el peso propio de la losa, pero sin perder su fuerza ni su rigidez.
Tal como explica Bill O'Donnell, el desafío fue liderado por DeSimone Consulting Engineer, quienes "para controlar el pandeo y reducir el peso propio, se incrustaron tubos de un diámetro de 300 milímetros en una losa reforzada de 430 milímetros de espesor". Estos huecos vacían la losa, reduciendo su peso e incrementando la eficiencia general de su sección estructural. Esta decisión también "eliminó la necesidad de una losa de post-tensión, reduciendo aún más el peso propio y el costo del proyecto".
El suelo del balcón se construyó con una losa reforzada de un espesor de 330 milímetros de espesor. Lo que es especialmente astuto, y que permite que la losa tenga ese espesor, es que las losas "se pliegan hacia abajo en el punto más profundo de la piscina, alineándose con el muro de hormigón reforzado ("shear wall") del departamento del piso inferior" para obtener mayor apoyo.
Debido a las divisiones escalonadas de los muros y la fachada hexagonal, estos muros de hormigón reforzado a veces se conectan a columnas estructurales, actuando "como un apoyo rígido que soporta la losa superior e inferior". En otras uniones no hay columna y es aquí donde "el muro no es tan rígido en estas ubicaciones, pero igualmente lleva la carga vertical de vuelta a la cadena de la columna". Estas paredes de hormigón de 450 milímetros de espesor no solo aumentan el soporte estructural, sino también se unen al piso plegado de la piscina para formar la estructura de panal hexagonal.
Mientras la profundidad de los balcones permiten crear un espacio exterior, los equipamientos del balcón sumaron nuevos desafíos. La cocina de verano y la piscina requirieron instalar un núcleo de servicios, que también necesitaban ser a prueba de agua y con una alta durabilidad a largo plazo. Esto significó que "cerca de una docena de conductos tuvieron que ser cuidadosamente instalados a lo largo de la cadena de columnas y que emergieran en la losa curvada en la ubicación exacta". Nuevamente los muros de hormigón reforzado fueron útiles en esta etapa, ya que concentran los servicios de drenaje de la piscina en su interior.
Debido al sistema estructural de Honeycomb, todo el hormigón usado en el edificio fue reforzado para garantizar la rigidez estructural del conjunto, con especial atención a la preparación de la mezcla de hormigón.
Para asegurar durabilidad se redujo la proporción entre agua y hormigón, y se sumó una capa de hormigón sobre el acero reforzado. Finalmente, para mayor protección, se utilizó una mezcla impermeabilizante integral y un revestimiento aplicado en la superficie final.